Adiós a Ennio Morricone, il genio de la música cinematográfica

Ennio Morricone nos ha dejado a los 91 años de edad, el gran compositor italiano se va con más de 500 bandas sonoras de películas creadas, más de cinco décadas dedicado al cine y la televisión y un legado inagotable.

Ennio Morricone

Autor musical de grandes filmes como ‘El bueno, el feo y el malo’ (1966) , ‘La misión’ (1986) o ‘Cinema Paradiso’ (1988). Sus melodías forman parte de la historia del séptimo arte, símbolo del cine italiano y especialmente del spaguetti-western, género que le debe muchísimo.

Un pasado de formación musical

Ennio nació en Roma, el 10 de noviembre de 1929. Hijo de Mario, trompetista profesional y Libera, ama de casa y costurera. Pronto, con el apoyo de su padre, aprendió a tocar la trompeta y desde muy niño se le vislumbraron dotes musicales. Morricone estudió en la Academia Nacional de Santa Cecilia de Roma, uno de los conservatorios más prestigiosos del mundo. Allí, perfeccionó su dominio con la trompeta y fue seleccionado para formar parte de la orquesta de la institución.

Se curtió en escenarios profesionales junto a su padre, mientras seguía mejorando sus aptitudes musicales, gracias al estudio de la armonía y la composición. Sus inquietudes le llevaron a interesarse por el trabajo de Alfred Newman, conocido compositor cinematográfico.

Sergio Leone y Ennio Morricone

Referente del cine italiano

No fue hasta los años 60, cuando Ennio entró en el mundo del cine como compositor de algunas comedias italianas poco trascendentes que no le requerían demasiado trabajo. Pero llegó el boom del spaguetti western y su ex-compañero de pupitre Sergio Leone, contó con él para crear la partitura de ‘Por un puñado de dólares (Per un pugno di dollari, 1964)’. Su particular estilo, con una instrumentación y musicalización poco ortodoxa lo encumbraron, convirtiéndolo en todo un referente del género.

Fue su primera colaboración con Leone con quien llegó a formar uno de los tandems director/compositor más importantes de la historia del cine al nivel del formado por Hitchcock & Hermann. A partir de entonces, Morricone compuso el resto de la escueta pero notable filmografía de Leone, haciendo especial mención a su partitura para ‘Érase una vez… En América’ (1984), la excelsa obra póstuma de Leone.

Sin duda, el western italiano no se entiende sin la figura de Morricone (y viceversa), género donde dejaría una huella imborrable; desde la trilogía del dólar (‘Por un puñado de dólares’ (1964) , ‘La muerte tenía un precio’ (1965) y ‘El bueno el feo y el malo’ (1966) pasando por ‘Una pistola para Ringo’ (1965), ‘El halcón y la presa’ (1966), ‘De hombre a hombre’ (1967) o ‘El gran silencio’ (1968), entre muchos otros.

The Ecstasy of Gold – Ennio Morricone ( El bueno, el feo y el malo).

Morricone, se resistió a abandonar su Italia natal donde nunca le faltó trabajo, llegando a colaborar con cineastas de la talla de Pier Paolo Pasolini (‘Pajaritos y pajarracos’ (1966), ‘Teorema’ (1968), ‘El decamerón’ (1971) o ‘Saló o los 120 días de Sodoma’ (1975), Dario Argento (‘El pájaro de las plumas de cristal’ (1970), ‘El gato de las nueve colas’ (1971) o ‘El arte de matar’(1996), Bernardo Bertolucci (‘Novecento’ (1976), ‘La Luna’ (1979) o ‘La historia de un hombre ridículo’ (1981) o Giuseppe Tornatore, del que fue compositor en prácticamente toda su filmografía y al que consideraba otro compañero fundamental. Especial mención al drama ‘Cinema Paradiso’ (1988) obra que ganaría el Óscar a la mejor película de habla no inglesa. También colaboró con Pedro Almodóvar con el soundtrack de ¡Átame! (1989).

Relación amor/odio con Hollywood

Aunque nunca le tentó vivir en Hollywood, compuso numerosas bandas sonoras de filmes norteamericanos de todos los géneros cinematográficos posibles demostrando que no sólo era un gran profesional sino que además fue uno de los artistas más versátiles en su campo. Excelentes películas como Días de Cielo (1978), La Cosa (El enigma de otro mundo)(1982), La misión (1986), Los intocables de Eliot Ness (1987) o Frenético (1988) contienen el sello Morricone.

Sin embargo, y pese a su prolífico trabajo, la Academia no le recompensó con el Óscar hasta 2006 (tras 6 nominaciones), cuando obtuvo el premio honorífico de manos de Clint Eastwood “por su magnífica y multifacética contribución al arte de la música cinematográfica”.

Diez años más tarde, siendo ya leyenda viva, obtendría su segundo Óscar, gracias a la Banda Sonora de ‘Los odiosos ocho’ dirigida por Quentin Tarantino, para la cual compuso dos temas originales y el resto, fueron descartes de John Carpenter de la OST de ‘La Cosa’. Tarantino siempre se declaró fan absoluto del compositor, llegando a utilizar varios temas suyos en otros de sus filmes como Kill Bill 1&2 (2002-03), Malditos Bastardos (2008) o Django desencadenado (2012).

Quentin Tarantino junto a Ennio Morricone

Enorme pérdida para la cultura

Ennio, acumuló numerosos reconocimientos durante toda su vida; Commendatore dell Ordine de la República de Italia, dos premios Grammy, dos Óscar, tres Globos de Oro, cinco BAFTA, diez David de Donatello y once Nastro d’argento. Siempre fue humilde y nunca abandonó del todo su profesión. De hecho, hasta el año pasado seguía de gira con su orquesta tocando sus temas más emblemáticos de siempre y concluyendo con un último y emotivo concierto en su Roma natal.

La música, el cine, el mundo de la cultura en general pierde a uno de sus grandes exponentes. Un mito que sigue muy vigente, bandas como Muse o Metallica siguen abriendo sus conciertos con dos de sus temas más populares. Sin duda, su obra le mantendrá en el recuerdo, ya que esas melodías ya están grabadas a fuego en el corazón de millones de personas de todo el planeta.

“La música de una película tiene que ser aquello que no se dice, ni se ve”.

-Ennio Morricone.

Disfruta de la música de Ennio Morricone, en su canales oficiales

Ennio Morricone

Arrivederci e grazie mille, maestro.

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