Desaparece uno de los últimos iconos del cine clásico
Hoy nos ha dejado a los 93 años Mickey Rooney, una auténtica leyenda del cine que llevaba toda la vida dedicada a la interpretación. Debutó en el cine con la tierna edad de 6 años (¡aún en la era del cine mudo!) pero su época dorada fue en los años 30 y 40, donde triunfó como estrella juvenil en películas de todos los géneros (melodrama, musical comedia).
Siempre fue un referente del Hollywood clásico, manteniéndose delante de las cámaras y entre cine y televisión acumuló más de 300 trabajos (números de auténtico récord) hasta llegar a nuestros días, donde tiene alguna película pendiente de estreno.
Sus papeles más recordados son ‘Los hijos de la farándula’ (1939), ‘La comedia humana (1943)’, ‘Amanecer sangriento (1956)’ y ‘El corcel negro (1979)’, películas con las que estuvo nominado al Oscar. También destacó su etapa en musicales con Judy Garland de pareja artística. Ya en siendo un veterano se le recuerda en series de televisión míticas como ‘Vacaciones en el mar’ (1982), ‘Las chicas de oro’ (1988), ‘Se ha escrito un crimen’ (1993).
Prolífico actor y… ¡amante empedernido!
Obtuvo dos Oscars honoríficos, en 1939 con el Juvenile Award como la personificación de la juventud en la gran pantalla y en 1983 como reconocimiento a su carrera cinematográfica y su aportación a la industria de Hollywood.
Aunque es suficiente su gran carrera para estar en el Olimpo de los Dioses del cine no podemos obviar su faceta de conquistador. A pesar de su escasa altura y su peculiar físico, estuvo casado 8 veces, entre ellas con algunas de las grandes bellezas de Hollywood, como Ava Garner, y mantuvo romances con Marilyn Monroe y Lana Turner.
¡Descanse en paz maestro!