Existen noticias que a uno no le gustaría nunca tener que escribir, como es el caso de los fallecimientos, y sobre todo cuando se le tiene un cariño especial al personaje en concreto, es mi caso con Leslie Nielsen, un actor que siempre he admirado por su asombrosa capacidad cómica. Leslie falleció ayer en Florida a la edad de 84 años a consecuencia de una serie de complicaciones derivadas de una neumonía.
El actor canadiense tuvo una dilatada carrera de más de 60 años en el mundo de la interpretación, donde se ganó una reputación en Hollywood gracias a multitud de papeles dramáticos en películas como ‘El planeta prohibido’ (1956) o ‘La aventura del Poseidón’ (1972), también participó de numerosos proyectos para la televisión.
Sin embargo se le recordará sobretodo por sus paródicas comedias destacando en las producciones de Jim Abrahams y los hermanos Zucker, ‘Aterriza como puedas’ (‘Airplane!’) interpretando al mítico doctor Rumack y en una de las franquicias más divertidas de la historia del cine: ‘Agárralo como puedas’ (‘Naked Gun’), en el rol del carismático teniente de policía Frank Drebin.
El éxito de estas producciones convirtieron este tipo de comedias prácticamente en todo un género y el simpático intérprete en todo un icono del humor absurdo. No en vano participó como estrella absoluta en muchas de ellas, como por ejemplo: ‘Drácula, un muerto muy contento y feliz’, ‘Espía como puedas’, ‘Acampa como puedas’, ‘¡Vaya un fugitivo!’ y ‘2001: despega como puedas’. Últimamente ya sólo se dedicaba a hacer pequeños cameos, como en las últimas entregas de la saga ‘Scary Movie’ o incluso en la cinta española ‘Spanish Movie’.
Fue embajador de UNICEF y estuvo casado en cuatro ocasiones, teniendo dos hijas con su segunda esposa, Maura y Thea Nielsen. Obtuvo dos candidaturas a los premios Emmy por la serie ‘Day by Day’ (1988) y ‘Police Squad!’ (1982). Hollywood le rindió homenaje en 2002, concediéndole una estrella en el ‘Hall of Fame’.
Siempre te recordaremos con una sonrisa, Leslie…
Una gran pérdida. Ayer volví a ver Agárralo como puedas para honrar su memoria y volví a comprobar su tremenda capacidad para hacer reír. Sus gestos, sus movimientos, ese rostro confuso frente al absurdo que le rodeaba… me hizo reír a carcajadas pese a saber que le acabábamos de perder. Y eso es lo que hace su figura aún más grande: da igual lo mal que te haya ido el día, o las noticias que hayas recibido, sus mejores películas cómicas son capaces de hacerte olvidar los problemas mientras te partes de risa.
Por último, me gustaría reivindicar otro de sus papeles que, en su momento, me divirtió muchísimo: el de Creepshow, donde hacía de un loco despiadado que torturaba cruelmente a su esposa y al amante de ésta.
El Rey de la comedia absurda.
Te hecharemos de menos.
Se ha publicado un homenaje póstumo en honor a Leslie en http://WWW.RequiemInPace.com?IDReg=999966331114
R.I.P.